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A un mes del terremoto que impactó las zonas costeras del noreste de Ecuador, las necesidades humanitarias persisten en la mayor parte de las zonas afectadas, en particular en áreas rurales y en comunidades con altos índices de vulnerabilidad.
El 18 de mayo ocurrieron 2 réplicas importantes, una de ellas de 6.8 y la otra de 6.9, con epicentro en la provincia de Esmeraldas.
El Centro de Operaciones de Emergencia Nacional sesiona nuevamente, evaluando los daños ocasionados por las réplicas.
El Gobierno de Ecuador estima que la población directamente afectada es de 240,704 personas, por el sismo del 16 de abril1
Un estimado de 28,678 personas continúan viviendo en albergues formales, sitios espontáneos, así como en familias de acogida.
Cifras oficiales reportan un total de 661 personas fallecidas.
El Ministerio de Desarrollo Urbano y Vivienda reporta 10,506 edificaciones afectadas o destruidas en el área urbana de Esmeraldas y Manabí. El Gobierno Autónomo Descentralizado de Manabí reporta 8,157 edificaciones afectadas en el área rural. Las evaluaciones de daños continúan.
Panorama de la Situación
Cuatro semanas después del terremoto aún se trabaja en la evaluación de daños, perdidas y afectaciones.
Hasta el momento, el número de personas muertas reportadas es de 661 y 12 personas desaparecidas.
La Asamblea Nacional aprobó un proyecto de ley para el ordenamiento territorial y fortalecer así las estrategias de reconstrucción en las zonas afectadas.
Al 14 de mayo, la asistencia alimentaria proporcionada por el gobierno alcanza los 696,666 kits de alimentos con el aporte de la comunidad internacional y las organizaciones de la sociedad civil.
La cobertura de agua por red pública en Manabí antes del sismo era del 52%. De este total, se ha logrado el restablecimiento del 60% del servicio a través de cobertura fija, plantas potabilizadoras y tanques distribuidores de agua.
Las Fuerzas Armadas y el Ministerio de Inclusión Económica y Social han identificado 250 albergues temporales y centros colectivos que alojan a unas 1,705 familias.
Han sido identificadas al menos 808 instituciones educativas con algún tipo de daño, afectando a un total de 249,598 estudiantes, de los cuales 121,000 se encuentran en las provincias de Manabí y Esperanzas, teniendo necesidades de espacios temporales de educación y protección.